miércoles, 11 de abril de 2018

El Pueblo Venezolano Resiste y Lucha


Articulo para la Revista Unidad y Lucha N° 36 de la Conferencia Internacional de Partidos y Organizaciones Marxistas Leninistas (CIPOML)

Desde hace algún tiempo el proceso revolucionario venezolano transita una etapa democrático burgués que en su proceso de descomposición y contradicciones internas lleva al pueblo a momentos de resistencia y lucha en pos de asumir su propio destino, basado en la premisa del derecho de los pueblos a su autodeterminación, transita un rumbo que puede abrir una posibilidad para impulsar la liberación nacional y el socialismo, tomando como referente la historia de resistencia a la invasión y colonización europea, así como las guerras de independencia y los intentos de construcción de una opción revolucionaria, por parte de los pueblos oprimidos por el imperialismo durante el siglo XX y lo que va del XXI.

En esta lucha, que cada día va cobrando más un carácter de resistencia antiimperialista, se encuentran y confrontan diversas corrientes ideológicas a lo interno de las fuerzas revolucionarias; unas burguesas que pretenden buscar respuestas a los problemas sobre la base de un “socialismo humanista”, “democratización del capital”, alabando sus dioses, héroes o tribunos, que espera soluciones en milagros y hechos del azar, que ignora la realidad científica de la economía política y juega a curar los males de la sociedad dependiente con emplastos y demagogia, otras materialistas que expresamos la transformación de la sociedad sobre la base de relaciones sociales de producción y el papel de las masas que producen sus propios dirigentes, en base a la ciencia, la acción y el trabajo, a decir la verdad a las masas buscando en su fuerza la solución. Habiendo una contradicción central irresoluble en este aspecto, se mantienen niveles de coincidencia sobre la base de la comprensión de la etapa de lucha que vivimos y la caracterización del enemigo principal.

Podemos decir que el proceso revolucionario venezolano, que se inicia con la introducción de las ideas socialistas a principios del siglo XX, ha avanzado desde el predominio de posiciones democráticas antidictatoriales y antigomecistas[i], hacia posiciones avanzadas de ruptura con el imperialismo y de lucha por el socialismo, teniendo hoy como concepción gobernante el planteamiento ecléctico y pequeño burgués del llamado socialismo del siglo XXI que por su carácter de clase no asimila la verdadera lucha contra el imperialismo, ni la lucha de clases, pero que alienta la lucha contra el “imperio”, entendido como opresión de EEUU y contra la burguesía tradicional, no contra toda la burguesía, ya muchos de los dirigentes “bolivarianos” van tratando de transformarse en la burguesía emergente asociada a los monopolios de China y Rusia.

Esa limitación ideológica no impide que exista una coincidencia en la lucha contra el imperialismo yanqui como enemigo principal, pero también está presente una contradicción en relación al papel de las potencias imperialistas del Bloque China – Rusia en lo general y con la burguesía emergente que ellos aspiran dirija la sociedad venezolana, en lo particular, por tal razón se genera una lucha ideológica permanente entre las ideas reformistas y las consecuentes del marxismo leninismo.

Esta lucha de tendencias, una reformista y la otra revolucionaria, a lo interno del proceso sustenta el debate ideológico en el que estamos inmersos, nutriendo el enfrentamiento cotidiano contra el enemigo principal, lo que ha venido dando paso a la generalización de una conciencia antiyanqui entre las mayorías populares, impulsada por ambas tendencias, cumpliéndose así con algunos de los objetivos expresados por nuestro partido desde su fundación hace ya 10 años, “Esta difícil ecuación plantea un reto para los marxistas-leninistas: construir el Partido en las condiciones específicas de Venezuela, desarrollar sus postulados teóricos, armarse de una estrategia clara y diseñar la táctica adecuada, defendiendo las reivindicaciones populares y democráticas, a la par que se consolida la organización de la clase obrera…[ii]

LA REALIDAD DE VENEZUELA

La compleja situación que se vive en estos momentos en Venezuela se podría definir como de resistencia y lucha popular ante la ofensiva del bloque imperialista EEUU-UE, se caracteriza en lo económico por un estancamiento del aparato productivo, disminución de su capacidad instalada, hiperinflación, bajos salarios, altos precios de las mercancías, especulación y acaparamiento, colapso de los servicios públicos, contrabando de extracción, desvalorización de la fuerza de trabajo y altas ganancias de los grupos monopólicos, concentración y centralización de capitales, lo que puede permitirnos concluir que es una economía capitalista, dependiente, en descomposición, bajo presión e influencia de múltiples agentes externos e internos sobre los que el gobierno ha perdido gobernabilidad, pudiendo resumir que todo esto es efecto de la confluencia de 4 elementos: 1- El impacto de la crisis capitalista, 2- La ofensiva del bloque imperialista EEUU-UE con su bloqueo 3- Los errores del gobierno en el manejo de la economía 4- La debilidad de la vanguardia proletaria para dirigir a las masas en este momento.

Pasaremos a explicar cada uno de los elementos causales de la situación política que se vive en Venezuela. 

1- El impacto de la crisis capitalista: 
Siendo Venezuela una país capitalista dependiente su economía se encuentra sometida a la división internacional del trabajo, es un punto particular del engranaje imperialista, recibe los impactos negativos o positivos de lo que suceda en la economía de las potencias imperialistas, por eso es afectada por la crisis general del capitalismo, la crisis económica de 2008, la crisis petrolera de superproducción por el fracking, además de sus propias distorsiones al existir un planteamiento llamado a la construcción de un “modelo post capitalista”, lo que genera la confluencia de múltiples factores no comunes a cualquier economía capitalista dependiente, como son el alto intervencionismo del Estado y las confrontaciones políticas agudas. 

Todo esto agravado por las presiones de una pugna entre bloques imperialistas que quieren consolidar su control manteniéndose el nivel de dependencia, por tal razón no es fácil definir con exactitud, en estado puro, los fenómenos económicos en proceso, encontrándose características de la crisis económica y de la depresión en términos de lo cuantitativo y cualitativo.

Por encontrarse en un momento de transición, entre la crisis y la depresión económica, con una notable influencia de agentes externos e internos la economía venezolana tiene características muy particulares y daños profundos que la acercan un punto de inflexión.

La crisis económica surgida en los EEUU en el año 2008 ha tenido una repercusión importante en todo el orbe, todos los continentes, países y ramas de la economía se vieron impactados, unos en un primer momento y otros posteriormente como secuela, principalmente por el desarrollo desigual y las acciones de los países imperialistas para transferir el impacto en su economía hacia su periferia, lo que generó subsiguientes ondas que aún hoy repercuten en muchos países incluyendo Venezuela.

En paralelo se produce la crisis petrolera, principalmente por la incorporación de una tecnología que ha permitido la posibilidad de explotar nuevos yacimientos en países que parecía habían llegado a un tope en su producción petrolera y que ahora incluso tienen capacidad de autoabastecimiento y exportación de crudo, como el caso de EEUU. Lo que ha generado, además del cambio en la realidad mundial, una superproducción relativa de crudo que llevó los precios a la baja. Por un exceso de confianza en la recuperación de altos precios, producto del análisis idealista del problema y por la escasez de repuestos e insumos que han paralizado áreas productivas, la industria petrolera venezolana ha ido en declive, pasando su producción de cerca de 3 millones de b/d a menos de 1,5 millones, lo que indudablemente ha hecho mella en toda una economía sustentada por décadas en estos ingresos.

2- La ofensiva del bloque imperialista EEUU-UE con su bloqueo
Las acciones del bloque imperialista EEUU-UE toman cada día una más clara característica de bloqueo; económico, militar, diplomático, informativo, que a pesar de los errores del propio gobierno de Venezuela en el manejo de la política externa son capaces de generar la solidaridad de los pueblos del mundo con una población agredida.

Este cerco contra el pueblo de Venezuela avanza en todos los frentes y se acerca de manera sostenida al cierre total, la búsqueda del aislamiento internacional propiciado por los gobiernos de los EEUU y las principales potencias europeas persigue el colapso del país y la rendición incondicional de un pueblo, que más allá del actual gobierno, ha decidido transitar un camino de ruptura con ese bloque opresor.

La lucha por el reparto de territorios y mercados entre potencias imperialistas se encuentra agudizada y se expresa claramente en Venezuela por la emergencia de potencias como China y Rusia que reclaman un papel más sobresaliente en el mapa terráqueo, durante esta agudización de la crisis general del capitalismo todos los países pasan a jugar un papel, algunos en el mantenimiento del estatus quo, otros en la búsqueda de su ruptura, habiendo una coincidencia temporal entre quienes tienen como enemigo principal al imperialismo yanqui. A partir de esta apreciación la lucha antiimperialista tiene diversos matices: Desde la lucha de la burguesía emergente que sólo quiere cambiar de socio y ahora establecer su centro económico y militar para garantizar sus negocios en el bloque China – Rusia, sin siquiera modificar las condiciones de dependencia y el papel del país, que realmente no son antiimperialistas sino anti EEUU-UE, hasta quienes luchamos contra el imperialismo, visto como fase superior del capitalismo, que debe ser enfrentado para abrir paso al socialismo y la construcción de nuevas relaciones de producción, es decir la lucha contra todos los imperialistas y en general contra el capitalismo, pasando por quienes, preñados de buenas intenciones, se plantean luchar por la independencia nacional, pero que no se plantean cambiar el régimen de producción sino que, idealistamente, creen en la posibilidad de un desarrollo capitalista independiente, donde se ubican muchos patriotas y nacionalistas.

En el caso particular de Venezuela, sin duda alguna, consideramos que el enemigo principal es el imperialismo yanqui, que dada su alta peligrosidad debe enfrentarse con la mayor fortaleza posible, por lo tanto se debe establecer acuerdos con todas las fuerzas dispuestas a enfrentar a este enemigo, sin perder nuestro perfil propio, sin dejar de enarbolar nuestras consignas, ni expresar nuestros objetivos estratégicos.

En tal sentido consideramos, basados en los planteamientos de Lenin, en los rasgos que definen el imperialismo, y en toda la teoría marxista-leninista sobre el tema, que China y Rusia son potencias imperialistas emergentes, que debe ser denunciado su carácter y su papel, pero que no son, por ahora el enemigo principal.

De igual forma consideramos que a pesar de las debilidades y errores el gobierno de Nicolás Maduro tampoco puede ser en estos momentos el principal objetivo para nuestros ataques. En cuanto se mantenga en la corriente de resistencia ante el imperialismo yanqui y permita a las organizaciones revolucionarias realizar su actividad, consideramos adecuado hacer énfasis en la acumulación de fuerza para enfrentar el enemigo principal, estando vigilantes que no caiga en las garras de las otras potencias imperialistas y luchando por la participación popular al mayor nivel posible, avanzando en la construcción partidaria. 

Venezuela vive un momento muy especial de su historia donde el pueblo ha dado muestras importantes de conciencia antiyanqui al resistir en difíciles condiciones materiales sin pasarse a la derecha, incluso militantes de base de la derecha rechazan la agresión de los EEUU y se oponen a la actitud entreguista de la soberanía de sus propios dirigentes.

Los imperialistas de los EEUU-UE llevan décadas haciendo esfuerzos por tomar de nuevo el control total del país, esto le ha sido imposible por la vía electoral y hasta ahora se le ha hecho difícil por la vía de fuerza, lo que no implica que dejen de hacer esfuerzos por lograr su objetivo y que pueda descartarse alguna de las opciones de fuerza como la invasión, el golpe de estado o la negociación como forma de crear las condiciones para retomar el dominio.

Es cada día más evidente que el bloqueo está en curso, se va profundizando y tiene varias facetas:

El bloqueo económico que se expresa en el aspecto financiero y en el aspecto comercial, en el primero se bloquean cuentas del país, se sanciona a los cuentadantes, se limita el acceso al crédito y se promueve la baja cotización de la deuda Venezolana, depreciando la moneda nacional a niveles nunca vistos. En lo comercial se promueve, principalmente por el diferencial cambiario, la fuga de todo tipo de mercancías hacia las fronteras, se obstaculiza el acceso de bienes a nivel internacional, incluyendo materias primas, insumos y repuestos, impactando las importaciones y obstruyendo la producción nacional, se promueve el contrabando de extracción, todos estos elementos que golpean de forma indetenible a la economía llevándola al colapso.

El bloqueo militar que se observa claramente en el posicionamiento de la OTAN en un anillo en torno a nuestro país, como instrumento de agresión del bloque imperialista EEUU-UE se ha posicionado por los cuatro puntos cardinales con disposición para cerrar por aire, tierra y mar todas las vías de acceso y con un punto de estrangulamiento bien definido por la frontera con Colombia, no en balde el gobierno de Santos llegó a acuerdos con la OTAN, ha aumentado las bases militares Estadounidenses en su territorio y busca acuerdos con la insurgencia. Todo esto con el firme propósito de despejar el camino para una intervención militar directa tomando cualquier excusa para el inicio de la agresión.

El bloqueo diplomático y político también avanza profundizando el proceso de debilitamiento del gobierno de Maduro, especialmente al desconocer los países de ese mismo bloque y su punta de lanza regional agrupada en el llamado “Grupo de Lima” la Asamblea Nacional Constituyente y en consecuencia todos los actos que de ella se derivan quedando entonces en funciones en el país, como único poder reconocido, según ese bloque agresor, el poder ejecutivo encabezado por Maduro, de tal manera que se han encargado de ir creando un gobierno paralelo en el exilio con un Poder Judicial (TSJ) que sesiona en la sede de la OEA formado por Jueces designados por la Asamblea Nacional apoyada por este bloque, una Fiscal General de la República que fue destituida por la ANC y que ha iniciado una querella contra el presidente ante el TSJ en el exilio. El poder legislativo producto de las elecciones de 2015 tiene sus miembros trabajando directamente desde el departamento de Estado de los EEUU, aunque fue desconocido en Venezuela.

Es evidente que la agresión imperialista internacional se propone dejar sin legitimidad el gobierno de Maduro y colocar en Venezuela un gobierno a la medida del bloque imperialista EEUU-UE, lo que hasta que se realicen elecciones presidenciales, En diciembre de 2018 o antes, se le dificulta porque el presidente constitucional de la República Bolivariana de Venezuela, señor Nicolás Maduro Moros fue electo en comicios avalados y reconocidos por ellos.

La realización de elecciones presidenciales anticipadas, cuya implementación ha sido acordada por la ANC, desconocida por ellos, significaría para el bloque imperialista EEUU-UE y sus lacayos, un paso firme en la perdida de la legitimidad del ejecutivo, y por lo tanto la posibilidad que los poderes espurios montados por ellos en el exilio designen un presidente interino para “llenar el vacío, recuperar la democracia, culminar el mandato y llamar a elecciones libres”.

Por todas estas razones debemos entender que el pueblo de Venezuela se encuentra bajo una agresión de grandes magnitudes, que se avecina una arremetida violenta del bloque imperialista de los EEUU-UE, que el alto nivel de conciencia del pueblo y sus elementos de vanguardia proletaria son los que han permitido hasta ahora resistir, incluso muchas veces en contra de un gobierno vacilante, plagado de errores: principalmente por su alta composición pequeño burguesa, pero que está obligado a resistir porque la derecha no quiere negociar y ellos tampoco quieren perder los privilegios y beneficios obtenidos durante su gestión de gobierno, menos aún terminar como Noriega en una cárcel de EEUU.

Algunos elementos patrióticos impregnan al gobierno y a las fuerzas militares, incluso a un sector de la oposición que en algún momento se opone a la intervención directa del imperialismo, elementos que van cobrando cada día más importancia y es necesario comprenderlos para no incurrir en errores estratégicos que puedan aislar y poner en riesgo el triunfo del proyecto del proletariado.

3- Los errores del gobierno en el manejo de la economía:
La condición burguesa y pequeño burguesa de la dirección del gobierno, la no comprensión de las leyes del capitalismo y de las experiencias vividas en los procesos de contradicción con el imperialismo, así como la mezcla de concepciones y los cambios permanentes en la conducción de la economía ha producido una serie de errores, como por ejemplo no desarrollar la agricultura y la producción industrial, hacen que la situación económica se torne más compleja cada día, porque el efecto de las medidas de bloqueo y los errores gubernamentales están llevando al colapso el aparato industrial, los servicios públicos, la producción agrícola. Las medicinas, alimentos, repuestos, se harán aún más escasos porque progresiva e inexorablemente entramos en el espiral de la guerra con sus consecuencias.

La catástrofe que algunos informamos ocurriría se avecina, pero es a la vez caldo de cultivo para una posibilidad de que las mayorías populares en medio del enfrentamiento con el enemigo principal, que es sin dudas el imperialismo yanqui, eleve aún más el nivel de conciencia y haga suyo el programa de los marxistas leninistas para enfrentar la agresión con todas las medidas de fuerza que exige la guerra de resistencia pudiéndose generar una situación revolucionaria.

Al pueblo de Venezuela le toca, ya es inevitable, pagar su cuota de sacrificio, debe ser nuestro esfuerzo el que permita que ese doloroso tránsito sea en pos de la construcción de una nueva sociedad y no como ovejas al matadero detrás de sueños pequeñoburgueses como ocurrió en otros países de la región y el mundo.

4- La debilidad de la vanguardia proletaria para dirigir a las masas en este momento:
Los partidos populares y proletarios, incluyendo el nuestro, no tenemos aún la suficiente fuerza para ponernos en este momento a la cabeza de la lucha, lo que no niega trabajar para que en alguna coyuntura podamos asumir la dirección, para lo que hay que esforzarse intensamente, evitando dejar las masas bajo la influencia ideológica y política de la reacción y el reformismo que les llevan a albergar ilusiones de la posibilidad de resolver las situaciones vividas en el marco de la política burguesa.

Cada día hay más sectores sociales conscientes de la necesidad de luchar en conjunto para enfrentar el enemigo principal, que no implica la superación inmediata de la dispersión entre la izquierda, ya que las iniciativas propias del movimiento popular no se terminan de consolidar, pero las iniciativas de frente popular avanzan progresivamente “al ir preparando las condiciones para respaldar las conquistas democráticas del proceso bolivariano y a la vez construir las bases para avanzar hacia el socialismo y el comunismo, lo que implica la unificación de las corrientes verdaderamente marxista-leninistas bajo un solo programa, desenmascarando a los reformistas y revisionistas, a los traidores del marxismo-leninismo de nueva y vieja estirpe.”[iii]

POSIBLES ESCENARIOS EN EL CORTO Y MEDIANO PLAZO

Los escenarios que se pueden prefigurar en el mediano plazo están marcados por la necesidad de resistir y por la posibilidad del avance revolucionario: 1- profundización del bloqueo. 2- Negociación tipo Nicaragua 3-Situación Revolucionaria. 4-Golpe de Estado 5-Invasión. 

1-Profundización del Bloqueo. 
El bloqueo en todas sus expresiones se sigue profundizando, en lo económico vemos el pronunciamiento del presidente de EEUU en relación al Petro y la continuidad en otras áreas comerciales, así como las investigaciones y sanciones a altos funcionarios del gobierno para obstaculizar la emisión de documentos de la República, en lo militar la OTAN y en especial sus socios de Brasil, Colombia y Guyana preparan acciones como continuidad de los movimientos estratégicos regionales, después de las elecciones presidenciales la situación será más complejas por el desconocimiento del gobierno que el bloque imperialista EEUU-UE prepara. 

2- Situación Revolucionaria. 
El empeoramiento de la situación económica lleva a que se expresen claras condiciones objetivas de agravamiento de las condiciones de vida entre la clase obrera y las mayorías populares, pero las condiciones subjetivas, principalmente el papel dirigente de la clase obrera se encuentra retardado. Es claro que como expresa Lenin los síntomas de una situación revolucionaria comienzan a expresarse: “1- La Imposibilidad para las clases dominantes de mantener inmutable su dominación;…no suele bastar con que -los de abajo no quieran-, sino que hace falta, además que - los de arriban no puedan- seguir viviendo como hasta entonces. 2- Una agravación, fuera de lo común, de la miseria y de los sufrimientos de las clases oprimidas. 3- Una intensificación, por estas causas, de la actividad de las masas, que en tiempos de “paz” se dejan expoliar tranquilamente…”[iv] Consideramos que todas las condiciones de una situación revolucionaria se pueden desarrollar en un mediano plazo. 

3-Negociación tipo Nicaragua. 
Un sector con bastante peso dentro del gobierno plantea la posibilidad de llevar a cabo un paso atrás por medio de una negociación con los representantes del imperialismo yanqui, con la esperanza de entregar el gobierno, mantener algunas cuotas importantes, sus riquezas, privilegios y retornar en otro período. Henry Falcón pareciera ser el eje de esta política habiendo hecho público un posible nombramiento del ministro Padrino López como Ministro de su hipotético gobierno (recordemos el caso de Humberto Ortega en Nicaragua). 

4-Golpe de Estado Militar. 
Los impactos de la crisis política penetran por todas las rendijas de la sociedad, esto incluye al estamento militar donde existen burgueses y proletarios, patriotas, demócratas, revolucionarios así como también entreguistas, traidores y contrarrevolucionarios. El impacto de la situación se observa cada día en declaraciones, acciones, detenciones de altos oficiales donde se maneja la intensión de un golpe de estado militar. Incluso el ministro de la defensa se ha pronunciado y rechaza la posibilidad de “tomar partido” y rechaza la vía de la guerra civil. 

5-Invasión Extranjera Directa. 
La invasión directa de fuerzas militares de la OTAN en Venezuela no se considera la forma más probable en los próximos meses, pero son evidentes los movimientos de los lacayos de Colombia, Brasil, Guyana además de Perú, Chile, México, Canadá, Aruba; Bonaire, Curazao, que con soporte y por medio de una fuerza regional pudieran usar cualquier excusa para que, desde Colombia o Brasil se inicie una agresión. 

Para los verdaderos revolucionarios no hay vuelta atrás; cualquiera de estos escenarios puede hacerse realidad e incluso todos pueden llevar a la guerra civil si se da un equilibrio de fuerzas entre fuerzas populares y la reacción, los mecanismos inexorables de la lucha de clases avanzan en Venezuela y aunque en esta etapa la lucha contra el imperialismo yanqui está en primera línea como expresión general de la lucha entre la burguesía y el proletariado en la cual otras capas de la sociedad, con conciencia nacional, patriótica, antiimperialista o de clase se suman a la lucha, sin la vanguardia del proletariado no habrá un verdadero triunfo, por eso esta ambigüedad pequeño burguesa no durará mucho tiempo, la socialdemocracia será desplazada bien sea con un acuerdo con la derecha o con un viraje hacia la izquierda, lo que implica: Si toma la derecha en cualquiera de sus expresiones la dirección política del país será un gobierno de los EEUU con mucha represión contra el pueblo y principalmente contra los revolucionarios. Si llegara a darse un verdadero gobierno revolucionario, dirigido por el proletariado, el bloqueo y la agresión serían de dimensiones más profundas. Por esta razón a los comunistas marxista-leninistas no nos queda otra opción que prepararnos a nivel nacional e internacional de la mejor forma para enfrentar los retos del futuro no muy lejano. 

Una política internacional marxista-leninista estructurada en base a la denuncia de la agresión imperialista del bloque EEUU-UE en Venezuela, al apoyo a la resistencia del pueblo, a la creación de bases populares para el enfrentamiento con el enemigo principal, que es común a todos nuestros pueblos, puede permitir el avance de las fuerzas revolucionarias en Venezuela y a nivel internacional, facilitando el logro de objetivos tácticos o estratégicos.

EL SOCIALISMO SÓLO SE CONSTRUYE CON LA ALIANZA OBRERO - CAMPESINA EN EL PODER Y EL PUEBLO ARMAS

CC del PCMLV 
Abril de 2018

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[i] Juan Vicente Gómez. Dictador que rigió los destinos de Venezuela entre 1910 -1935
[ii] Con el surgimiento del PCMLV avanza el marxismo-leninismo en Venezuela. Unidad y Lucha N°17. Octubre 2008. P.116
[iii] Ibidem.
[iv] V.I. Lenin. La bancarrota de la II Internacional. Editorial Progreso. Obras Completas. Tomo V. p.226

1 comentario:

Angelvioleta dijo...

excelente análisis camaradas, muchas gracias por ese aporte. A difundirlo, estudiarlo y organizar acciones!!